Mirada palpable.

Comprendo tu curiosidad, lo desconocido siempre causa más intriga. Y la propia esencia del misterio es un acercamiento muy distante que no se logra concretar.
Sin embargo, mientras el interés sea recíproco, todavía hay una oportunidad de que eso pueda cambiar.
Esa relación es un sentimiento bello, pues a ella perteneces y también eres ajeno, la tratas de olvidar mientras le dedicas tiempo, es como un ateo visitando un templo, como un religioso que anhela el infierno, o desear la muerte para volverse eterno...
El misticismo queda reservado en la propia contrariedad de la situación, con un esclarecimiento del estado podría desaparecer, o quizás no; por lo pronto, me he asegurado de disfrutar la conexión, pues una mirada ha conquistado un corazón.